Me pierdo en la mirada de las personas, en el aire frío de esta ciudad habitada por toda clase de animales y personas de todas las clases posibles. Me río y estornudo, sonrío nervioso. Me esfuerzo en pasar por la vida y que la vida no me pase por encima. Tranquilidad estática. Personas intermitentes, cariño falso, besos excitantes y vacíos. Las lenguas se rozan y le voy conociendo, mi cabeza me dice que es lo que busco, mi libido me dice que todavía falta tiempo. Sus ojos me dan calor, encienden la ternura perdida, sus labios me recuerdan porque me encanta besar. Confusión, soy tan vago como para buscar algo más que lo que tengo, un sueldo que debe ser el más pequeño de su familia, no paga ni mi habitación. Buscar nuevo trabajo? lo contemplo, lo pienso y ni siquiera sé lo que quiero. Mi tarjeta ya está mandada a hacer, soy el responsable de comunicación, de una empresa que no necesita más que una buena reestructuración. Cae mi cabello y me vuelvo a sentar para pensar en la vida que tengo, en la que quiero y en la que todo el mundo piensa que tengo.... Escribo y pienso, y sólo para pensar que cada vez que lo veo, me pierdo...