hoy amanecí adolorido, el minichinomusculoso ha hecho su trabajo... y mientras me siento así, pasan por mi mente cosas que han pasado este año e inmediatamente suena la canción no bravery de James Blunt y me pregunto si será que no tengo valor (valentía) para enfrentar todo lo que me pasa, he tratado de huir.

un secreto ya es suficiente, y mi escasa experiencia de la vida no me ayuda a aclarar mi mente. ya acaba el año (increíblemente rápido). empieza una etapa en la que realmente no sé qué haré, ni cómo lo haré.

cambios buenos o cambios malos pero al fin y al cabo cambios que marcarán el resto de mi destino por la tierra, por esta vida, por el resto de mis días. planes a corto, mediano y largo plazo que me inundan la cabeza, que me aterran.

un procedimiento quirúrgico meramente estético, un curso de branding (que me interesa de una manera extrañamente particular), una rutina de ejercicios supervisada, la tesis, un viaje (quizás sin regreso), la incertidumbre de cómo sobreviviré en un país extraño con personas desconocidas, pero en el anonimato que necesito de manera radical.

decisiones que me abruman y que me hacen temer de lo que realmente sería capaz de hacer por lograr aquellos objetivos que me he propuesto... (hmmm, aclarando que mi dignidad no tiene precio, con la frase anterior asumo que me acerco más al maquiavelismo...)

23 años, decisiones que me afectarán por siempre, metas trazadas (y las que debido a mi terquedad no serán cambiadas ni removidas)...

muchas cosas por hacer y sólo me pregunto si seré valiente o me rendiré en el camino...